El Poder de la Mente Sub. 03 y 04

El Poder de la Mente Subconsciente 3 Y 4

EL PODER DE LA MENTE SUBCONSCIENTE
Joseph Murphy

Capítulo 3º

Capítulo 4º

EL PODER DE LA MENTE SUBCONSCIENTE
Joseph Murphy

Parte 3ª

3. El milagroso poder de trabajo de su subconsciente     
El poder del subconsciente es enorme. Le inspira y le guía y le revela los nombres, los hechos y las escenas que están guardados, «archivados» en su memoria. Su subconsciente inició los latidos de su corazón, controla la circulación de su sangre, regúlala digestión, la asimilación y la eliminación. Cuando usted come pan, su subconsciente tiene también que ver con la transmutación de este producto a tejidos, músculos, esqueleto y sangre. Este proceso va más allá de los poderes del más sabio de los hombres. Su subconsciente controla los procesos vitales y las funciones de su cuerpo y tiene las respuestas para todos los problemas.
Su subconsciente nunca duerme, nunca descansa. Está siempre trabajando. Usted puede descubrir el poder de trabajo maravilloso de su subconsciente. Dígale antes de dormirse que usted quiere que se realice cierto asunto y se sorprenderá al descubrir que sus fuerzas in­ternas empiezan a trabajar llevándole a obtener los resultados. Ahí es donde existe una fuente de poder y sabiduría colocándole a usted en contacto con la omnipotencia o el poder que mueve el mundo, que guía los planetas en su curso y que origina la salida del sol.
El subconsciente suyo es la fuente de sus ideas, de sus aspiraciones y de sus necesidades altruistas. Fue a través de su subconsciente que Shakeaspeare percibió las grandes verdades ocultas en el prome­dio del hombre de sus días. Indudablemente, ésta fue la respuesta de la mente subconsciente que inspiró y movió al escultor griego Phidias, al ejecutar en bloques de mármol y en bronce, belleza, orden, simetría y proporción. Permitió al artista italiano Rafael, pintar madonas, y a Ludwig Van Bethoven componer sinfonías.
En 1955, yo di una conferencia en la Universidad de Yoga de Rishiashrishikesh y tuve oportunidad de conversar con un cirujano de Bombay. Él me contó acerca de un cirujano escocés que trabajó en Bengala antes del descubrimiento del éter o de los métodos modernos de anestesia. Entre 1843 y 1846 este médico realizó unas 400 opera­ciones, desde amputaciones, extracciones de tumores, cáncer, hasta operaciones en los ojos, oídos y garganta. Todas las operaciones fue­ron conducidas bajo anestesia mental solamente. Este doctor hindú me informó que la mortalidad postoperatoria de estos pacientes era extremadamente baja, ya que sólo murieron de un dos a tres por cien­to. Los pacientes no sintieron dolor y no ocurrieron muertes durante las operaciones. Este médico sugestionaba a la mente subconsciente de todos sus pacientes, que estaban en estado hipnótico; las heridas no se infectaban ni desarrollaban condiciones desfavorables postopera­torias. Usted debe recordar que antes de Luis Pasteur, Joseph Lister y otros habían identificado la infección como causada por virus y ya habían apuntado el origen de las enfermedades bacteriales causados por instrumentos no esterilizados y a organismos virulentos del am­biente.
Este cirujano Hindú decía que la razón de la baja mortalidad y la ausencia general de infección se redujo a un mínimo, debida indu­dablemente, a la sugestión que este médico ejercía sobre la mente sub­consciente de sus pacientes. Ellos respondieron de acuerdo con la na­turaleza de esta sugestión.
Es simplemente bello, cuando usted piensa que hace ciento vein­ticinco años un cirujano descubrió los maravillosos poderes de trabajo de la mente subconsciente. ¿Podrá ser para usted una suerte, una clase muy especial de mística cuando usted por un momento se de­tiene y piensa en los poderes trascendentales de su mente subcons­ciente? Considere el fenómeno de la percepción extrasensorial, por ejemplo, la clarividencia, la independencia del tiempo y el espacio, la capacidad para no sufrir dolor, la capacidad para obtener respuesta a todos los problemas, cualquier otro fenómeno de este mismo tipo. Todos éstos y muchos más revelan que hay un poder y una inteligen­cia dentro de usted que trasciende el intelecto y que causa y produce maravillas. Todas estas experiencias producen regocijo y fe en el po­der de la mente del subconsciente que trabaja.

EL CONSCIENTE ES EL LIBRO DE SU VIDA
Cualquier pensamiento, creencia, opinión, teoría o dogma que usted escribe, o imprime en su mente subconsciente, usted debe expe­rimentarlos como las manifestaciones subjetivas de circunstancias, condiciones y eventos. Lo que usted escribe en la parte interna lo ex­perimentará en el exterior. Usted tiene dos lados en la vida: objetivo subjetivo, visible e invisible pensamiento y manifestación del mismo.
Su pensamiento es recibido en su cerebro que es el órgano de la mente que razona consciente. Cuando su consciente o mente objetiva acepta el pensamiento completamente es enviado al plexo solar llama­do el cerebro de su mente donde comienza a manifestarse en forma de experiencias.
Tal como se había resumido anteriormente, su mente subcons­ciente no discute. Actúa solamente de acuerdo a lo que usted escribe en ella. Acepta su veredicto o las conclusiones de su mente conscien­te como finales y determinantes. Esta es la razón por la cual usted siempre estará escribiendo en el libro de la vida, debido a que sus pen­samientos se convierten en experiencias propias.
El ensayista americano Ralph Waldo Emerson, dijo «el hombre es lo que piensa todo el día».

LO QUE SE IMPRIME EN EL SUBCONSCIENTE SE MANIFIESTA EXTERIORMENTE
William James, el padre de la psicología americana, dijo que el poder de mover al mundo está en la mente subconsciente. Su mente subconsciente es una mente con infinita inteligencia y sabiduría infi­nita. Se alimenta de pequeños resortes ocultos y es llamada la ley de la vida.
Se deberá por tanto imprimir siempre en el subconsciente ideas correctas y pensamientos constructivos.
La razón por la cual hay tanto caos y miseria en el mundo, es debido a que la gente no entiende la interacción, la relación del cons­ciente con el inconsciente. Cuando estos dos principios trabajan de a-cuerdo, en paz y de manera sincronizada, usted encontrará salud, belleza, felicidad, paz y entendimiento. Tenga la segundad que no exis­te enfermedad, ni discordia cuando estas dos mentes trabajan armo­niosamente y en paz.
Abrieron la tumba de Hermes con gran expectativa y sensación, pues siempre se creyó que contenía grandes secretos. No había tales misterios. El secreto fue así: tal como está dentro así será afuera; tal como está arriba así será abajo.
En otras palabras, todo aquello que está impreso en el subcons­ciente suyo está expresado en el espacio. La misma verdad fue procla­mada por Moisés, Isaías, Jesús, Buda, Alotase y todos los iluminados de todas las épocas y religiones. Cualquier cosa que usted sienta co­mo verdadera subjetivamente se expresa como condición, experien­cia y evento. La moción y la emoción deben encontrarse en equilibrio.
Descubrirá, observando usted k naturaleza una ley de té acción y la reacción; del reposo y el movimiento. Estas dos deben estar balanceadas para obtener la armonía y el equilibrio para permitir que

 el principio de la vida fluya a través de usted, rítmica y armoniosamente. Las entradas y las salidas deben ser iguales. La impresión y la expresión deben ser iguales. Toda frustración es debida a un deseo no realizado. Esto, a pesar de que las teorías freudianas han sido revaluadas en gran parte, aún existen muchos sicólogos experimentales que sostienen estas tesis.
Si usted piensa negativa, destructiva y viciosamente, sus pensa­mientos generarán emociones destructivas y para darles una salida de­berán ser expresadas o manifestadas. Estas emociones al ser de natura­leza negativa frecuente, se manifestarán en úlceras, en trastornos car­díacos, tensión o angustia.
Ahora yo le pregunto: ¿Cuál es la idea que usted tiene de usted mismo? Tenga en cuenta que su vitalidad, su cuerpo, su estado fi­nanciero, sus amigos, Su estado social, representan un reflejo perfecto, una proyección de la idea que usted tiene de usted mismo y es el verdadero significado impreso en su mente subconsciente manifesta­da en todas las fase* de su vida.
Nosotros nos herimos a nosotros mismos por culpa de las ideas negativas que consideramos. Cuántas veces se ha herido usted mismo al ponerse bravo, al temer, al estar celoso ó vengativo7 Estos son los venenos que entran en su mente subconsciente. Usted no nació con estas actitudes negativas. Alimente su mente subconsciente con pen­samientos que traigan vida y podrá borrar todos los patrones negativos que encuentran dentro de usted. A medida que continúe hacien­do esto, todo el pasado será borrado y no habrá más recuerdos tristes, destructores, que minen su alegría.
EL SUBCONSCIENTE CURA UNA ENFERMEDAD MALIGNA EN LA PIEL
Voy a referir una curación personal como la evidencia más con­vincente para el más escéptico debido a los poderes curativos de la mente -subconsciente. Hace unos 40 años, me pude curar un cáncer de piel por mis propios métodos. La terapia médica había fallado pa­ra evitar el crecimiento de este cáncer desarrollado progresivamente
Un sacerdote con profundo conocimiento psicológico refiriéndo­le sobre mi enfermedad quiso consolarme con el siguiente argumento: «Este reloj tiene fabricante, y el fabricante primero tuvo una idea en su mente antes-de que el reloj se convirtiera en una realidad objetiva, y si el reloj se dañaba este fabricante podía arreglarlo». Mi amigo me recordaba que la inteligencia subconsciente que había creado mi cuerpo era como el fabricante del reloj y que él también conocía exacta­mente cómo curarlo, cómo restaurarlo y dirigir las funciones vitales y los procesos de mi cuerpo, pero que debería proveer la guía de la salud. Y esto actuaría como una causa y el efecto sería la curación
Entonces, yo inicié la sencilla oración siguiente «Mi cuerpo y todos mis órganos fueron creados por la infinita inteligencia de mi mente subconsciente. Yo sé cómo curarme. Su sabiduría hizo mis órganos, mis tejidos, mis músculos y mis huesos. Esta curación infinita está presente dentro de mí, está transformando cada átomo de mi ser, haciéndome a mí como un todo más perfecto. Estoy agradecido por la curación que está realizándose. Maravillosas cosas de inteligencia creativa están pasando dentro de mí»
Recé en esta forma durante 5 minutos, dos o tres veces al día, repitiendo las mismas frases, tres meses después, mi piel se había cu­rado completamente.
Como usted puede ver, todo lo que hice fue darle modelos vivi­ficantes de totalidad, belleza y perfección a mi mente subconsciente, desechando las imágenes negativas y los patrones de pensamiento ani­dados en mi subconsciente causantes de todos mis problemas. Nada existe en su cuerpo excepto el equivalente mental; el día que usted cambie su mente, redirigiéndola con afirmaciones usted cambiará su cuerpo. Esta es la base de todas las curaciones.
COMO EL SUBCONSCIENTE CONTROLA TODAS LAS FUNCIONES DEL CUERPO
Cuando usted está despierto o dormido, su mente subconscien­te se halla en actividad incesante, controlando todas las funciones vi­tales de su cuerpo sin necesitar la ayuda de su mente consciente. Por ejemplo, cuando usted está dormido, su corazón continúa contrayén­dose y sus pulmones no descansan en el proceso de inhalación y ex­halación continua. Así que su sangre absorbe oxígeno y actúa lo mis­mo que estando despierto. El subconsciente controla los procesos di­gestivos y glandulares, así como las misteriosas operaciones del cuerpo. El pelo continúa creciendo así usted esté dormido o despierto. Los científicos le dicen a usted que la piel segrega mucho más sudor du­rante el sueño que estando despierto. Sus ojos, sus oídos y sus senti­dos están activos durante el sueño. Por ejemplo, muchos de nuestros grandes científicos han recibido respuestas durante su sueño a pro­blemas que nos dejaría perplejos. Ellos encontraron las respuestas cuando sonaban.

Muy a menudo, la mente consciente interfiere con el ritmo nor­mal del corazón, pulmones y el funcionamiento del estómago, los in­testinos, por preocupación, angustia, miedo o depresión. Estos patro­nes de pensamiento interfieren con el funcionamiento armonioso de una mente subconsciente. Cuando se está mentalmente enfermo, el procedimiento mejor es relajarse, abandonarse, abstraerse, despreocu­parse. Hable entonces a su mente subconsciente ordenándole paz, ar­monía y orden, y ya verá como todas las funciones de su cuerpo se volverán normales de nuevo. Pero debe hablar a su mente subconsciente con autoridad y convicción; ésta le obedecerá.
Su subconsciente busca preservar su vida y restaurar la salud a cualquier precio. Esto hace que usted ame a sus hijos, lo cual tam­bién ilustra el deseo instintivo de preservar la vida.
¿COMO HACER PARA QUE EL SUBCONSCIENTE SUYO TRABAJE PARA USTED?
Parta de un principio que repetiré centenares de veces: Su men­te subconsciente siempre está trabajando, activa noche y día, mien­tras usted trabaje o esté en reposo. Aceptamos que el subconsciente es el creador de su cuerpo, pero usted no puede oír conscientemente el silencio o un proceso silencioso. También sus negocios tienen que ver con la mente consciente y no con la inconsciente. Mantenga la mente consciente ocupada con las perspectivas de lo mejor, y esté seguro de que sus pensamientos están basados en amor, en verdad, en justicia, en buenas obras. Comience ahora a cuidar su mente conscien­te, sabiendo en su corazón y en su alma que su mente subconsciente está siempre reproduciendo y manifestándose de acuerdo con su pen­samiento habitual.
Del mismo modo como el agua ocupa el lugar del recipiente que la contiene, el principio de la vida que existe en usted fluye a través de usted, de acuerdo con la naturaleza de sus pensamientos con la ayuda y presencia curativa de su subconsciente brindándole armonía, sa­lud, paz, abundancia y felicidad.
Hágase a la idea de que usted no está solo, que hay una inteli­gencia viviente, una compañía amorosa en su vida. Crea firmemente que está continuamente fluyendo a través suyo, vivificándole, inspi­rándole y haciéndole próspero. Responderá exactamente de esa ma­nera. Esto será un hecho pero sólo en la medida que usted lo crea.
EL PRINCIPIO DE CURACIÓN SUBCONSCIENTE RESTAURA NERVIOS ÓPTICOS ATROFIADOS
Existe un conocido caso suficientemente comprobado: el de Madame Vire de Francia, registrado en los archivos del departamento médico de Lourdes en Francia. Ella visitó Lourdes, siendo ciega, con nervios ópticos atrofiados e inútiles. Obtuvo lo que se ha dado en lla­mar una curación milagrosa. Ruth Cranston, una joven que investigó y escribió acerca de la curación de Lourdes en la revista MacCall’s de noviembre 1955, escribe acerca de Madame Bire, como sigue: «En Lourdes ella recobró la vista de una manera increíble, con los nervios ópticos aún sin vida y con los testimonios de los médicos después de repetidas observaciones que sus mecanismos de visión se habían res­taurado en su totalidad y eran normales. Desde el punto de vista mé­dico, ella estaba viviendo con unos «ojos muertos». Yo he visitado a Lourdes varias veces y he podido observar curaciones. No hay duda de que en otros santuarios del mundo ya sean cristianos o no, también suceden. En el capítulo siguiente explicaremos algunos.
Madame Bire a la cual me refería, no se curó por la acción mila­grosa de unas aguas; se curó por medio de su mente subconsciente res­pondiendo a su creencia. El principio de curación dentro de ella, den­tro de su mente subconsciente, respondió a la naturaleza de su pensa­miento. La creencia es un pensamiento de la mente subconsciente. Sig­nifica aceptar algo como verdad. El pensamiento aceptado se ejecuta automáticamente. Indudablemente Madame Bire con una gran fe y con el convencimiento de que ella recibiría la curación. Su mente subconsciente respondió de acuerdo con esto liberando las fuerzas curativas.
COMO LLEVAR LA IDEA DE LA SALUD PERFECTA A SU MENTE SUBCONSCIENTE
Conocí en Sudáfrica a un sacerdote quien me comentó el méto­do utilizado por él para llevar la idea de la salud perfecta al subcons­ciente. El padecía un cáncer de pulmón. Su técnica, tal como él me la había dado, de su propio puño y letra decía así: «varias veces al día me aseguro de estar totalmente relajado mental y físicamente. Rela­jo mi cuerpo hablan dolé en la siguiente forma: «mis pies están relaja­dos, mis rodillas están relajadas, mis piernas están relajadas, mis mús­culos abdominales están relajados, mi corazón y mis pulmones están relajados, mi cabeza está relajada, mi totalidad está completamente relajada. Después de 5 minutos me siento adormilado y digo la siguien­te verdad: «Una divina perfección se expresa ahora a través de mí. La idea de la salud perfecta llena mi mente subconsciente. La imagen que Dios tiene de mí es una imagen perfecta y mi subconsciente re­crea de nuevo mi cuerpo de acuerdo con la imagen perfecta que tengo en la mente de Dios».
Este sacerdote se curó de manera sorprendente. Este ejemplo es un modelo simple para llevar la idea de la salud perfecta a la mente subconsciente. Otra manera de llevar la idea de salud a la mente sub­consciente es a través de una imaginación disciplinada o científica. Le conté a un hombre afectado por una parálisis funcional, que hicie­ra «1 esfuerzo mental de verse caminando en su oficina, tocando el es­critorio, contestando el teléfono y haciendo todas las cosas que ordi­nariamente haría si estuviera sane. Expliqué a esta persona la idea de tener una imagen mental y salud perfecta aceptadas por su mente sub­consciente.
Él vivió este rol imaginario, se figuró estar en la oficina, sabía que estaba dándole trabajo a su mente subconsciente para que está pudiera entrar en acción. Su mente subconsciente era como la pelícu­la que él estaba imprimiendo. Un día después de varias semanas de frecuente acondicionamiento de la mente, para esta película mental, sonó varias veces el teléfono, mientras su esposa y enfermera se en­contraban fuera de casa. El teléfono estaba a unos cuatro metros, pero él se las arregló para contestar. Una hora después estaba curado. El poder de curación de su subconsciente, respondió a la imagen mental y la curación no se hizo esperar.
Este hombre tenía un bloqueo mental causado por los impulsos del cerebro, inmovilizándole sus piernas y es así como él dijo estar impedido para caminar. Cuando modificó su obsesión interna, se pro­dujo una liberación del bloqueo creado erróneamente obstaculizando su poder interno y así le permitió caminar.

REPASO DE LO LEÍDO EN EL CAPITULO ANTERIOR. IDEAS QUE SE DEBEN RECORDAR

  1. Su mente subconsciente controla todos los procesos vitales de su cuerpo y conoce las respuestas a todos los problemas.
  2. Antes de irse a dormir, haga un requerimiento específico al sub­consciente tratando de probar el poder de trabajo milagroso del subconsciente suyo en usted mismo.
  3. Cualquier cosa que usted imprima en su mente subconsciente, se proyecta en la pantalla del espacio como acontecimientos y experiencias. Por lo tanto, usted debe escoger cuidadosamente las mejores ideas y los pensamientos que alimentan y consideran su mente consciente, desechando las ideas nocivas, las destructo­ras de la paz interior y del amor.
  4. La ley de la acción y la reacción es universal. Su pensamiento es acción, y la reacción es la respuesta automática de su mente sub­consciente a su pensamiento. ¡Cuidado con sus pensamientos!
  5. Toda frustración se debe a deseos no cumplidos. Si usted fija demasiado su atención y comenta frecuentemente los obstáculos, las demoras v las dificultades, su mente subconsciente forma­ra un muro de contención y bloqueará su propia felicidad y paz del espíritu.
  6. El principio de la vida correrá a través de usted rítmica y armo­niosamente si usted afirma conscientemente: «Estoy seguro que el poder subconsciente que me da este deseo, se está llenando dentro de mí». Esto disolverá sus conflictos.
  7. Usted llegara a interferir el ritmo normal de su corazón, de sus pulmones, de sus órganos si usted alimenta preocupación, an­gustia y miedo. Alimente su subconsciente con pensamientos de armonía, salud y-paz y todas las funciones de su organismo se normalizarán de nuevo.
  8. Guarde y mantenga su mente subconsciente ocupada con la es­peranza de lo mejor, y su subconsciente reproducirá de manera fiel su pensamiento habitual.
  9. Imagine un final feliz o una solución afortunada a su problema; sienta la emoción de lograr algo y lo que usted se imagina y siente, será aceptado y lo logrará con su mente subconsciente.

CAPÍTULO 4º

4. Curación mental en tiempos antiguos
A través de los tiempos, todos los hombres han pensado instinti­vamente que en alguna parte residía un poder curativo que podía res­taurar las funciones normales del hombre. Se creía que este poder ex­traño podía ser invocado bajo ciertas condiciones, consiguiendo el alivio del sufrimiento humano. La historia de todas las naciones pre­senta testimonios para sostener esta creencia.
En la temprana historia del mundo, el poder de influenciar mis­teriosamente al hombre, ya fuere para bien o para mal, incluyen­do la curación del enfermo, se le atribuía a ciertos sacerdotes de cada una de las naciones. La curación del enfermo se suponía fuera a causa de un poder derivado directamente de Dios, y los procedimientos de la curación eran muy diversos en el mundo entero. El proceso de cu­ración tomaba la forma de súplicas a Dios, seguidas de varias ceremo­nias y ayudados con amuletos, talismanes, anillos, reliquias, imágenes, etc.
Por ejemplo, en las religiones de la antigüedad, los sacerdotes de los templos daban drogas al paciente y practicaban la sugestión hip­nótica antes de que el paciente se durmiera, diciéndole que los dioses le visitarían en su sueño y le curarían. Muchas curaciones siguieron a la utilización de este método. Obviamente, esto era el trabajo de la su­gestión en la mente subconsciente.
Después del éxito de ciertos ritos misteriosos, los devotos de Hecate verían a la diosa durante el sueño, siempre y cuando antes del sueño ellos hubieran rezado de acuerdo con las instrucciones fantásti­cas y un tanto bizarras. Se les decía mezclaran lagartijas con resina, y mirra, revuelto todo esto al aire libre y en luna llena. Muchas curaciones se reportaron utilizando estos grotescos procedimientos.
Es obvio que tales extraños procedimientos mencionados en los casos anteriores, eran favorecidos por la sugestión y aceptados por la mente subconsciente de estas personas, lo que se constituía en una poderosa arma para la imaginación. De hecho, en estas curaciones, la mente subconsciente de cada persona era el curandero que opera­ba estas acciones.
En todas las épocas los curanderos han obtenido resultados mag­níficos en casos en los cuales las autoridades médicas han fallado. Es­to hace que la gente piense con respecto de los poderes de curande­ros, magos, yerbateros, etc. Cómo es que en todas las partes del mun­do estos individuos hacen curaciones. La respuesta a todas las cura­ciones se debe a la creencia ciega de la persona enferma que libera el poder curativo de su mente subconsciente. Muchos de los remedios y métodos empleados eran bastante extraños y fantásticos y en ocasiones excitaban tanto la imaginación de los pacientes que les producía un estado emocional exaltado En este ánimo se facilitaba la su gestión dé la salud siendo aceptada por el consciente y por el subconsciente del enfermo En el siguiente capítulo informaremos un poco más en este sentido.
RECUENTOS BÍBLICOS ACERCA DEL USO DE LOS PODERES SUBCONSCIENTES
«Lo que usted desee, cuando ora creyendo que lo recibe. y us­ted lo recibirá «. Marcos 11:24. Observe la diferencia en los tiempos gramaticales empleados El escritor inspirado nos dice que debemos creer y aceptar como ciertos los hechos de que nuestro deseo se ha cumplido ya en su totalidad y que su realización seguirá como un hecho en el futuro inmediato El éxito de esta técnica depende de la convicción de que el pensamiento, la idea, es ya un hecho en la mente Para que algo tenga sustancia en la mente, se debe pensar en ello corno si en realidad existiera allí.

Aquí, una pocas palabras constituyen la direccional específica y concisa para hacer uso del poder creativo de los pensamientos gra­cias a la impresión que ellos hacen en la mente subconsciente.
Sus pensamientos, sus ideas, planes, propósitos, son tan reales como su mano o su corazón. Siguiendo la técnica bíblica deben eli­minarse todas las contingencias adversas. Usted debe plantar la semi­lla o el concepto, en la mente, el cual si usted no lo cambia germinará infaliblemente en frutos externos.
La primera condición en la cual Jesús insistía era en la fe: «De acuerdo con tu fe así recibirás». Si usted siembra ciertas semillas en la tierra, es porque tiene fe en su desarrollo como debe ser. Confian­do en las leyes de la agricultura sabemos que de las semillas plantadas crecerán las plantas correspondientes.
La fe es una manera de pensar, una actitud de la mente, una cer­teza interna, sabiendo que la idea que usted acepta de manera total en su mente consciente crecerá envuelta en su mente subconsciente y hecha manifiesta. La fe es, en cierto sentido, aceptar como verdadero aquello que no vemos o aquello que la razón y los sentidos pueden negar.
Un ejemplo clásico de la Biblia lo tenemos en San Mateo 9:28-30. «Y cuando él entró en la casa el ciego se aproximó: ¿y Jesús les di­jo, creéis que yo soy capaz de hacer esto? Ellos le dijeron. Sí, Señor, Entonces tocó sus ojos diciendo, de acuerdo a tu fe así sea en ti; y sus ojos vieron; y Jesús les recomendó especialmente, que ningún hombre lo sepa «.
En las palabras de Jesús: «De acuerdo con tu fe así sea en tú», usted se da cuenta que Jesús estaba llamando a los poderes de la men­te subconsciente del hombre ciego, al tratar de hacerle ver. Su fe era su gran expectación, su sentimiento interno, su convicción interna que algo milagroso iba a ocurrir y que sus plegarias serían contesta­das y así fue. Esta es una técnica a la cual se le ha dado crédito desde hace muchísimo tiempo, muy utilizada para curar inclusive por numerosos grupos que curan en el mundo cualquiera que sea su religión. En las palabras «que ningún hombre lo sepa», dichas al ciego re­cién curado se comprende que no debían contarlo a nadie, evitando así exponerse a las críticas escépticas de los no creyentes porque equi­valdría a deshacer los beneficios recibidos.
MILAGROS EN VARIOS TEMPLOS A LO LARGO DEL MUNDO
Célebres casos de curación milagrosa se han efectuado en todo el mundo, especialmente en Japón, India, Europa y América. En el Japón visité el famoso templo llamado Diabutsu, donde existe una estatua gigantesca de Buda sentado, fundida en bronce, con las ma­nos cruzadas, la cabeza inclinada en una actitud de profundo éxtasis contemplativo. Tiene 14 metros de altura; se la llama el Gran Buda. Ante ella jóvenes y viejos hacían ofrendas de dinero, frutas, arroz, na­ranjas; prendían cirios, quemaban incienso y rezaban oraciones de pe­tición.
El guía explicaba el canto de una jovencita; mientras ella rezaba, colocaba dos naranjas como ofrenda y prendió un cirio; el guía expli­có que la joven había perdido la voz y como la había recuperado en este templo, estaba agradeciendo a Buda por haberla recobrado. Sim­plemente tenia fe en. que Buda le devolvería su bella voz para cantar, si ella seguía ciertos rituales, ayunaba y hacía ciertas ofrendas, todo lo cual encendía su fe y su expectación produciéndose el apropiado condicionamiento de su mente hasta llegar a la cúspide de la creencia absoluta. Su mente subconsciente respondió a esa creencia.
Para demostrar aún más el poder de la imaginación y la creencia ciega, relataré el caso de un pariente enfermo de tuberculosis.
Sus pulmones estaban destrozados. Su hijo decidió curarle. Se encaminó a la casa de su padre al oeste de Australia, diciéndole que había conocido a un monje quien acababa de regresar de un templo curativo de Europa. Le dijo a su padre que este monje tenía un pequeño trocito de la cruz de Cristo y se la había comprado por 500 dólares. Este joven simplemente había tomado un trozo de madera corriente y la había hecho montar en un anulo, diciéndole a su padre que muchos habían sido curados por el solo hecho de tocar el anulo donde estaba engarzado el trocito de la cruz. Avivó la llama de la es­peranza en la imaginación de su padre, hasta el punto que el viejo to­mó el anillo, lo colocó sobre su pecho y empezó a orar silenciosamen­te, yéndose a dormir. A la mañana siguiente había iniciado su proce­so de autocuración. Posteriormente los tests clínicos mostraron la evi­dencia de su mejoría.
Usted sabe, desde luego, que no fue el pedazo de madera lo que hizo el milagro, fue la imaginación del padre en un grado muy inten­so, además de un deseo de curación muy profundo, de curación per­fecta. La imaginación se unió a su gran f ¿, a un sentimiento subjetivo: La unión de los dos, trajo la curación. El padre nunca supo este pe­queño engaño que le había hecho su hijo, pues de haberlo sabido pro­bablemente hubiera recaído. A partir de esta mágica curación, no vol­vió a sufrir de tuberculosis, viviendo quince años más hasta la edad de 89 años.
UN PRINCIPIO DE CURACIÓN UNIVERSAL
Todas las escuelas de curación del mundo tienen casos de cura­ciones fantásticas. La explicación del fenómeno está basada en un principio común, la mente subconsciente; y el proceso de curación es la fe. Es importante ahora recordar una vez más las siguientes rea­lidades fundamentales:

  1. Que usted posee funciones mentales que han sido distinguidas como la mente consiente y la mente subconsciente.
  2. Su subconsciente siempre es susceptible al poder de la sugestión. Más aún, su mente subconsciente tiene un completo control de sus funciones, condiciones y sensaciones de su cuerpo.
  3. Yo me aventuro a creer que todos los lectores de este libro se han familiarizado con el hecho de que los síntomas de casi todas las enfermedades pueden ser inducidos por hipnosis, sugestión o su­gestión hipnótica.

Por ejemplo, un sujeto bajo el estado de hipnosis puede desarro­llar altas fiebres, puede palidecer o sonrojarse, o pueden darle temblo­res, de acuerdo con la naturaleza de la sugestión requerida. Como ex­perimento usted puede sugestionar a una persona que está paralizada y no puede caminar y así ocurrirá. Otra prueba: Coloque una taza con agua fría debajo de la nariz de un sujeto hipnotizado y dígale que es pimienta y que la huella. Inmediatamente estornudará.
Un hombre le dice que es alérgico a cierta hierba; colóquele una flor sintética de esta hierba o un vaso vació enfrente de su nariz. Cuan­do esté bajo hipnosis, dígale que esa es la hierba que le produce aler­gia y le hace estornudar; inmediatamente desarrollará los síntomas alérgicos. Esto indica que la causa de la enfermedad está en la mente; la curación de estas enfermedades puede tomar lugar mentalmente también. Usted se da cuenta de las curaciones maravillosas que se ha­cen a través de la osteopatía, la medicina quiropráctica, la homeopa­tía y la medicina natural. Así como también de los sistemas utilizados por las diversas religiones en el mundo entero, pero es obvio que to­das ellas se realizan por medio de la mente subconsciente.
Ciertas enfermedades no pueden ser curadas solamente por el poder del subconsciente puesto que no están afectadas por los pode­res de la misma, pero cierto es que la mayoría de las enfermedades se agravan por influencias negativas que la mente consciente obra sobre la mente subconsciente y mejoran por el proceso inverso de la in fluencia positiva.
Dese cuenta cómo se cura una herida que usted se ocasiona al afeitarse: se cura sola El médico tapa la herida y dice: la naturaleza la curará. Por naturaleza indica la ley natural, la ley de la mente subconsciente, o el instinto de preservación que es la función de la men­te subconsciente.
El instinto de auto preservación es la primera ley de la naturale­za. Su instinto más fuerte es el más-potente de todas las autosugestio­nes.
TEORÍAS ENORMEMENTE DIFERENTES
Seria tedioso y probablemente no nos conduciría a nada el dis­cutir largamente las numerosas teorías que existen en las diferentes sectas religiosas y grupos de terapia religiosa. Existe un gran número que claman que, debido a sus específicas teorías, los resultados son mejores. Esto como se explica en este capítulo, no es verdad.
Franz Antón Mesmer, médico austriaco (1734-1815) que practi­caba en París, aplicando los imanes al cuerpo enfermo, con lo que cu­raba milagrosamente, realizó curaciones mediante piezas de metal o de vidrio; pero no quiso continuar utilizándolos declarando que tales curaciones se debían al «magnetismo animal», alegando que esa «sus­tancia» era proyectada por el médico al paciente. El nombre de Mes­mer y su método en el tratamiento de enfermedades incluyendo el hipnotismo, se divulgaron por todo el mundo habiendo tomado el nombre de Mesmerismo.
Muchos médicos afirmaban que el método de Mesmer era puro hipnotismo y no otra cosa.
Aquellos grupos de médicos, siquiatras, osteópatas, quiropodistas y practicantes así como los sucesores de hoy y las diferentes igle­sias, están aplicando el mismo poder de la mente subconsciente.
El proceso de toda curación positiva, actitud mental, actitud in­terna o senda del pensamiento en definitiva se llama fe.
La curación es debida a la confianza que actúa como poderosa sugestión sobre la mente subconsciente liberando su poder de cura­ción.
Un hombre no se cura de una manera diferente a otro. Es cierto que cada cual puede tener su método y manera de curar. Pero sólo hay un proceso en la curación: la fe. Sólo hay un medio de curación: su mente subconsciente.
Elija la teoría y método que usted prefiera; tenga la seguridad y si tiene fe, obtendrá los resultados deseados.
BREVE SÍNTESIS SOBRE PARACELSUS
Philippus Paracelsus, alquimista y médico suizo famoso (1493-1541) fue un gran curandero en sus tiempos quien sentó el siguiente principio básico:
«Sea el objetivo de su fé. real o falso, el resultado obtenido será siempre el mismo «.
Si yo creo en San Pedro obtendré el mismo resultado que sí creo en la estatua de San Pedro. Pero esto es superstición. La fé, sin em­bargo produce milagros; y sea verdadera o falsa dicha fé, siempre pro­ducirá resultados maravillosos.
Los puntos de vista de Paracelsus fueron sostenidos también por uno de sus seguidores Pietro Pomponazzi, un italiano del siglo XVI, filosofo, quien decía  «Fácilmente podemos concebir los maravillosos efectos que la confianza y la imaginación pueden producir especial­mente cuando hay reciprocidad entre el asunto o problema y la persona que lo influye. Las curaciones atribuidas a la influencia de ciertas reliquias son el efecto de su imaginación y confianza en sí mismo Curanderos y filósofos saben que si se sustituyen los huesos de un santo, por otros cualesquiera, o el esqueleto mismo, los feligreses que van en busca de curación milagrosa obtendrán los mismos resultados que con las verdaderas reliquias del santo’
Tanto si usted cree en los poderes milagrosos de un santo, come en los efectos curativos de ciertas aguas, conseguirá los mismos resultados por la poderosa sugestión dada a su mente subconsciente. Esto último es lo que cura

EXPERIMENTOS DE BERNHEIM
Hipólito Bernheim, profesor francés de medicina en Nancy (1910-1919) expuso el mecanismo de la sugestión ejercida sobre el enfermo, por el médico a través de la mente subconsciente.
Bernheim publicó su libro titulado «Terapéutica de Sugestión». En la página 197 refiere el caso de un hombre con parálisis en la len­gua, cuya afección no cedió a ningún tratamiento.
Su médico le informó que había conseguido un nuevo instrumen­to con el cual le prometía curarle. En realidad, introdujo un termó­metro de bolsillo dentro de la boca del enfermo quien mostró gran admiración por tal instrumento que venía a salvarle.
En unos momentos gritó, movió la lengua con toda libertad, lleno de júbilo.
Podríamos citar varios casos, añade Bernheim:
Una jovencita vino a mi consultorio buscando recuperar la voz perdida hacía unas cuatro semanas. Después de examinarla y hacer mi diagnóstico, dije a mis alumnos estudiantes que se puede recupe­rar la voz perdida mediante corrientes eléctricas lo cual ejerce gran in­fluencia sugestiva en el paciente. Mandé a buscar aparatos de induc­ción, apliqué mi mano encima de la laringe haciendo un pequeño mo­vimiento v le dije, «ahora podrá hablar en voz alta». En un instante le hice pronunciar «a» después «b», luego «María» y continuó ha­blando indistintamente; su mudez había desaparecido.
Con este ejemplo demuestra Bernheim el poder de la fé; ayuda­da con la expectación del paciente se forma un poder que actúa por sugestión a través de la mente subconsciente.
PRODUCIENDO UNA AMPOLLA POR SUGESTIÓN
Bernheim llegó a producir una ampolla en la espalda de un pa­ciente por el mero hecho de aplicarle un sello de correos y sugestio­nándole que era ungüento atrapa-moscas. Este hecho ha sido confirmado según experimentos realizados por otros médicos en diferentes países, lo cual no deja duda de que el cambio estructural es un posi­ble resultado de la sugestión de los pacientes por la palabra, o con­vencimiento verbal.
LA CAUSA DEL ESTIGMA DE SANGRE
En el libro de Hudson, «Law of Psychic Phenomena» (La ley del Fenómeno Psíquico) página 153, dice: «Hemorragias y estigmas de sangre pueden ser inducidas en ciertos sujetos por medio de la su­gestión. El Dr. M. Bourru puso bajo estado sonámbulo a cierta perso­na sugestionándole así: «A las cuatro de esta tarde, después de la hip­nosis usted vendrá a mi consultorio y se sentará en mi sillón cruzando sus brazos sobre su pecho y su nariz empezará a sangrar». A la hora indicada el joven hizo lo «ordenado; varias gotas de sangre salieron de sus fosas nasales.
En otra ocasión, el mismo médico trazó el nombre del paciente en ambos antebrazos con un instrumento puntiagudo. Y cuando esta­ba sonámbulo le dijo: «A las cuatro de esta tarde usted se irá a dor­mir y sus brazos sangrarán por las líneas marcadas que yo he trazado apareciendo el nombre suyo en letras de sangre». Tal como le ordenó a las cuatro se fue a dormir; de su brazo izquierdo manaba sangre por las letras marcadas con un punzón y en varias partes aparecieron go­tas de sangre Las letras eran bien visibles; tres meses después desapa­recieron gradualmente en varios días.
Estos hechos demuestran la posición de dos correctas actitudes La constante docilidad de la mente subconsciente ante el poder de su gestión y el control perfecto ejercido por la mente subconsciente por encima de otras funciones, sensaciones, y condiciones del cuerpo.

REPASO SOBRE PUNTOS OE CURACIÓN
1       Recuerde usted mismo frecuentemente que el poder curativo es­tá en su mente subconsciente.

  1. Sepa que la fé es como la semilla sembrada en la tierra; crece después según su clase. Siempre pues la idea (semilla) en su men­te, riéguela y fertilícela con expectativa favorable y deseo mani­fiesto.
  2. La idea que usted tenga para un libro, un nuevo invento y lo que quiera hacer, manifiéstelo, conviértalo en realidad.

4.     Cuando rece por otra persona, tenga presente que su sabiduría interior puede modificar los moldes negativos en la mente de otros con resultados estupendos.
5.    Las curaciones milagrosas que usted haya oído sobre varios reli­carios son debidas a la imaginación y a la fé ciega que actúa en la mente subconsciente, liberando el poder de curar.
6.     Toda enfermedad se origina en la mente; nada aparece en el
cuerpo que no haya sido concebido por la mente.
7      Los síntomas de casi todas las enfermedades pueden ser induci­dos por sugestión hipnótica. Esto demuestra el poder de su pen­samiento.

8. Solo hay un proceso de curación y es la fé. Sólo hay un poder curativo: Su mente subconsciente.

9. Sea el objeto de su fé real o falso, usted obtendrá el resultado. Su mente subconsciente responde a su pensamiento. Mire por encima de la fé como un pensamiento en su mente y esto le bas­tará.