Oráculo Osho Zen
Respira profundamente, relájate, silencio interior, conéctate con tu esencia o ser superior, hazte una pregunta y recibe o elige un número que te traerá un interesante mensaje. Hazlo a menudo y ejercitarás un don, un poder que hay en ti, la concentración y la meditación.
Para mí el Tarot era un libro de la vida, en el que te contaba todos los procesos y circunstancias que todos o casi todos solemos pasar, alegrías, tristezas, problemas, desesperación, fortuna, estrella, maestría, etc. Es un libro de la vida. Luego con el tiempo se convirtió en unas cartas que te sirven para ayudarte a esclarecer en los procesos en los que te encuentras y las circunstancias que estás pasando.
Puedes conectarte con tu interior y hacer una pregunta, de cualquier cosa, para ti y luego coger y elegir una carta.
Todo lo que tú entiendas te tiene que ser de ayuda orientativa.
Si quieres jugar a unas cartas diferentes, piensa en un número del 1 al 78 y lee tu carta. Hazte una pregunta, analiza una circunstancia y siente tu intuición al coger una carta y leerla y que te sirve de apoyo a tu conocimiento interior.
También puedes coger dos dados y tirarlos, y ver qué número te sale.
El tarot permite descifrar el universo y el sistema nervioso del hombre, y así vivir en armonía con ambos: el interior y el exterior. Probablemente, los tres son manifestación, en planos de realidades diferentes y modalidades diferentes, de la misma verdad Una. La magia del tarot está en hacer accesible esa información
Una lectura de Tarot proyecta las tendencias de tu vida con mucha certeza. Las lecturas invitan a una REFLEXIÓN más profunda de tu conducta; porque si alguien quiere que la respuesta de su entorno cambie, si desea ser una mejor persona, definitivamente, tiene que sacar tiempo para la reflexión.
Deseo aclarar que una lectura de Tarot no determina tu futuro, simplemente te ofrece opciones que no contemplabas; descubre tu yo oculto, te brinda oportunidades y otras perspectivas desde donde tomar mejores decisiones en el aquí y el ahora. Una lectura puede alertarte o predecir una tendencia, pero EL FUTURO lo creas tú, con las decisiones que tomas ahora mismo. Mis lecturas están enfocadas en el presente, que es el momento donde reside tu poder.
Tarot Osho Zen. Explicación.
Tarot Osho Zen. Introducción.
Durante treinta años de charlas a discípulos y amigos, Osho respondió a preguntas de éstos o comentó las enseñanzas de los grandes sabios del mundo y de las Sagradas Escrituras. Hoy día, esas charlas continúan aportando una nueva y fresca percepción a todo lo tratado en ellas, desde las complejas escrituras védicas hasta las familiares palabras de Jesús. Osho habla con igual autoridad de los hasditas, los sufíes, los místicos baúles, los yoguis y los budistas. Pero a la larga acaba por centrarse en la transmisión de la sabiduría del zen, pues, según dice, se trata de la única tradición espiritual cuyo enfoque de la vida interior de los seres humanos ha superado la prueba del tiempo y es aún relevante para la humanidad contemporánea.
A diferencia de otras religiones, que han llegado a ser víctimas de su culto a los héroes y del dogmatismo, el zen hace hincapié en la capacidad única de cada ser humano para alcanzar la iluminación (es decir, la liberación de las ilusiones del ego creadas por la mente), e insiste en que sólo a través de la meditación es posible llevar tal capacidad a efecto: no realizando determinados rituales ni cumpliendo reglas ni imitando el ejemplo de otros por muy respetables que sean, sino únicamente gracias a un estado de atención vigilante y libre de crítica sobre los propios pensamientos, acciones y sentimientos.
Cuando practicamos esta vigilancia, este enfoque meditativo respecto a la vida, enseguida nos hacemos conscientes de que cada uno tenemos un centro de vigilancia inmutable, imperturbable y eterno; un centro que tiene la capacidad de ver la vida como una gran aventura, como un juego, como una escuela de misterio y, finalmente, como un viaje pleno de dicha en el que el único propósito es deleitarse con cada paso a lo largo del camino.
En palabras de Osho, lo que lleva una cualidad de luz y amor a todo lo que hacemos es la capacidad de convertirse en un buda, de desarrollar el estado de alerta interior, y no el hecho de venerar a los budas ni de seguir a otras personas.
Osho ha sido siempre algo más que un simple orador o un filósofo. Así, en la comuna de amigos que le ha rodeado ha creado una atmósfera en donde las verdades de las que habla pueden ser experimentadas directamente. Por ello, hacer el camino en su compañía no supone retirarse a las montañas para llevar una vida de ascetismo y reposo, lejos de «la plaza del mercado».
Por el contrario, implica involucrarse totalmente en la tarea de despertar, empleando para ello una abundante variedad de meditaciones y terapias psicológicas y de sanación física, así como mediante mucha risa y diversión y grandes dosis de creatividad y trabajo duro. Fregar el suelo es una meditación: tanto como sentarse en silencio en presencia del maestro; y afrontar las luchas de poder personales con los compañeros de trabajo de la cocina es tan trascendente como entender el Sutra del Diamante, de Gautama el Buda. Incluso los altibajos de las aventuras amorosas tienen su lugar en el viaje de descubrir quiénes somos.
Es en el contexto de este enfoque de la vida, de este compromiso para hacer de la totalidad de la vida una meditación, que se ha creado este tarot. Y está dedicado al buda que todos y cada uno de nosotros somos en nuestro interior.
La condición de buda no es monopolio de nadie, no es «los derechos de autor» de nadie; es el ser más profundo de cada uno. No tienes que ser budista para ser un buda. La budeidad trasciende todos los conceptos de las religiones: es el derecho de nacimiento de todos los humanos. Trata de que te acompañe, en tus actividades cotidianas, para que todo en tu vida se convierta en meditación, en gracia, en belleza, en bendición.
No-Mente: Las Flores de la Eternidad
La existencia del tarot se remonta a hace miles de años, desde el Antiguo Egipto o, tal vez, incluso antes. No obstante, su primer uso conocido data de la Edad Media: en aquellos tiempos turbulentos, sus imágenes se utilizaron a modo de códigos para transmitir las enseñanzas de las Escuelas de Misterio medievales. Con el tiempo, el tarot ha sido utilizado de muchas formas: como herramienta para predecir el futuro, como un divertido juego de salón, como una forma de buscar información «oculta» sobre diferentes situaciones, etc.
Algunos dicen que el número de cartas se basa en el número de pasos que dio el pequeño Siddhartha —quien más tarde se convertiría en Gautama el Buda— en el momento de su nacimiento. Dice la leyenda que fueron siete pasos hacia adelante y otros siete hacia atrás, siguiendo cada vez la dirección de cada uno de los cuatro puntos cardinales; y esto se convirtió en el modelo para las «cartas menores» del tarot.
Además de estas 56 cartas de los llamados Arcanos Menores, el tarot tiene otras 22 adicionales (los Arcanos Mayores) que proporcionan una descripción completa del viaje espiritual del ser humano. Desde el primer paso inocente de El Loco a la culminación de la travesía representada por la carta Conclusión, en los Arcanos Mayores descubrimos las imágenes arquetípicas que nos conectan a todos como seres humanos. Ellas nos describen un camino de auto descubrimiento que es absolutamente único para cada individuo, si bien las verdades profundas que deben descubrirse son las mismas, independientemente de raza, género, clase o religión.
En la baraja del tarot tradicional, este viaje de auto descubrimiento se realizaba según una trayectoria espiral, por lo que la carta Conclusión llevaba a un nuevo nivel en el camino, a un nuevo comienzo, con la entrada otra vez de El Loco. En este Tarot Osho Zen, sin embargo, se ha añadido la carta de El Maestro, pues ella nos permite dejar atrás la espiral y dar un salto fuera de la rueda de muerte y renacimiento. El Maestro simboliza la trascendencia suprema de la travesía en sí misma, una trascendencia que se hace posible únicamente cuando el ego individual y separado se disuelve en la iluminación.
En definitiva, el Tarot Osho Zen, no es un tarot tradicional en el sentido de jugar en base a predicciones. Es más bien un juego trascendental zen que refleja el momento, mostrando constantemente lo que hay aquí y ahora, sin juicio ni comparación. Este juego es una llamada a despertar, a sintonizar con la sensibilidad, la intuición, la receptividad, el coraje y la individualidad.
El hecho de que esté centrado en la consciencia es una de las muchas innovaciones, con respecto a los viejos sistemas y conceptos sobre el tarot, que pronto se hará evidente para los consultantes experimentados a medida que comiencen a trabajar con el Tarot Osho Zen.
Los ARCANOS MAYORES
Estas veintidós cartas llevan números romanos, desde el La cero al veintiuno, y representan los temas centrales arquetípicos del viaje espiritual humano. La carta de El Maestro, que simboliza la trascendencia, no tiene número.
Cuando una carta de los Arcanos Mayores aparece en una lectura, tiene un significado especial, superior y más allá de las cartas de los Arcanos Menores. Nos informa de que en las circunstancias actuales tenemos la oportunidad de examinar uno de los temas centrales de nuestra propia travesía individual. Será particularmente útil mirar otras cartas referentes a este tema central, por ejemplo: ¿Qué tiene que ver el hecho de que haya estado trabajando demasiado duro (carta Agotamiento) con mi necesidad de auto expresión (carta Creatividad)? ¿Cómo estoy impidiendo mi progreso en el camino hacia la creatividad al poner toda mi energía en mantener la «máquina en marcha»?
Si no salen cartas de los Arcanos Mayores en la lectura, probablemente la situación actual es un aspecto transitorio del juego más amplio que es tu vida. Ello no quiere decir que esa situación carezca de importancia o que debas sentirte estúpido porque te afecte mucho, pero la misma ausencia de Arcanos Mayores puede confirmar «que esto también pasará», y tal vez más tarde te preguntes por qué se armó todo ese lío.
Por último, el que aparezcan cartas de los Arcanos Mayores en una lectura puede indicar que se está dando un cambio importante en las escenas y personajes del juego. De hecho, hay veces que la cantidad de cartas de Arcanos Mayores es tan abrumadora que quizás prefieras elegir simplemente una de ellas, aquella que te impacte con un mensaje más claro, como pieza central de una nueva lectura que te ayude a comprender aquello que ahora estás enfrentando.
Los ARCANOS MENORES
Las cincuenta y seis cartas están divididas en cuatro palos La que representan los cuatro elementos. En todas ellas aparece la figura del diamante como motivo central, pero es el color del mismo lo que permite distinguir un palo de otro (un color elegido en función del propio palo): azul para el Agua, rojo para el Fuego, gris para las Nubes, y los colores del arco iris para el palo del mismo nombre. Al igual que en un juego de cartas corriente, cada uno de estos palos del tarot contienen las denominadas «figuras», a las que aquí se les han dado nombres que representan simplemente las diferentes oportunidades para ganar maestría sobre los cuatro elementos que ya se tienen, despojándoles así de la importancia que sus aristocráticos títulos feudales les confería.
El Fuego corresponde a los bastos del tarot tradicional y representa el campo de acción y respuesta, la energía que nos hace entrar en situaciones y salir de ellas de nuevo cuando seguimos nuestros instintos viscerales en vez de hacer caso a nuestras mentes o a nuestras emociones.
El Agua reemplaza a las copas tradicionales, que representan el lado emocional de la vida, y tiende a ser una energía más femenina y receptiva que la del Fuego, que es más masculina y extrovertida.
Las Nubes se han elegido para reemplazar las espadas tradicionalmente el palo del elemento aire y, representan la mente. Esto se debe a que la naturaleza de la mente no iluminada es precisamente como una nube, por la forma en que impide el paso de la luz y oscurece el paisaje que tenemos alrededor, impidiéndonos ver las cosas como realmente son. Sin embargo, hay otro aspecto referente a las nubes que no debe desestimarse: van y vienen, así que ¡no deben tomarse demasiado en serio!
Finalmente, el palo del Arco Iris de esta baraja reemplaza al tradicional de pentáculos u oros, que representan el elemento tierra. Aunque éste es tradicionalmente el elemento que representa lo práctico, el lado material de la vida, se ha elegido el arco iris para este palo en base a la actitud zen de que incluso las actividades más humildes, más terrenales, contienen una oportunidad para celebrar lo sagrado. Al utilizar el arco iris —que une la tierra con el cielo, la materia y el espíritu— nos acordamos de que en realidad no hay separación entre lo más alto y lo más bajo, que se trata incluso de un continuum de una energía total, y de que el cielo no es un lugar remoto en lo alto del firmamento sino una realidad que debe descubrirse aquí mismo en la Tierra.
Por tanto, éste es un viaje de descubrimiento y el camino hacia la trascendencia suprema. Ve ligera y juguetona-mente desde las cumbres hacia los valles, y de regreso otra vez hacia las cumbres, saboreando cada paso del camino. Si aprendes de tus errores no puede irte mal.
Obviamente, puedes preguntar al tarot lo que quieras, aun cuando éste en realidad no es más que un vehículo para exponer lo que ya sabes. Cualquier carta que saques como respuesta a un tema es una reflexión directa de lo que algunas veces eres incapaz o no deseas reconocer en ese momento. Aun así, únicamente a través del reconocimiento (sin juzgarlo como correcto o erróneo), desde una perspectiva de desprendimiento, puedes empezar a experimentar plenamente tus alturas y profundidades: todos los colores del arco iris de nuestro ser.
Cuando consultes el «espejo» del tarot, baraja bien las cartas, imaginándolas como un receptáculo en el cual estás poniendo tu energía. Cuando estés preparado, ponlas boca abajo en forma de abanico y utiliza tu mano izquierda, la receptiva, para elegir aquellas que den respuesta a tu inquietud actual. Acuérdate de permanecer en el momento a medida que vayas descubriéndolas, dejando que tus respuestas interiores clarifiquen tus inquietudes externas.
Como podrás experimentar, las imágenes del Tarot Osho Zen, están vivas. Su impacto es innegable, ya que nos hablan en un lenguaje que nuestro ser más profundo reconoce, de forma que despiertan la comprensión y traen claridad.
En la parte final del libro se incluyen unas cuantas formas de echar las cartas, pero a la larga acabarás desarrollando la tuya propia. Sé creativo: las posibilidades son ilimitadas.
Trata de estar tan silencioso y conectado como sea posible mientras estés empleando la baraja, pues cuanto más capaz seas de percibir el proceso como un regalo para tu crecimiento individual, más significado tendrán los mensajes para ti.
El Oráculo Osho Zen es un sistema de cartas basado en las enseñanzas del maestro espiritual Osho. Estas cartas están diseñadas para proporcionar una guía inspiradora y transformadora en diferentes aspectos de la vida.
El Oráculo Osho Zen consta de 79 cartas, cada una de las cuales presenta una imagen artística y un mensaje reflexivo. A diferencia de otros oráculos, las cartas del Oráculo Osho Zen no siguen el tradicional sistema de interpretación, sino que se centran en el aquí y ahora, en la comprensión del momento presente y en el despertar de la conciencia.
Las cartas del Oráculo Osho Zen se basan en la filosofía zen y en la idea de vivir plenamente el momento presente, sin apego al pasado o preocupación por el futuro. Cada carta invita a la reflexión y a la exploración interior, abordando temas como la sabiduría, la conciencia, la aceptación, la creatividad, la transformación y la conexión espiritual.
Al utilizar el Oráculo Osho Zen, se selecciona una o varias cartas y se reflexiona sobre su mensaje y su imagen. Las cartas ofrecen una visión profunda y provocadora de la vida y nos invitan a examinar nuestras creencias, a tomar decisiones conscientes y a cultivar una mayor conciencia en todas nuestras experiencias.
Es importante recordar que el Oráculo Osho Zen no predice el futuro, sino que ofrece una guía para el crecimiento personal y espiritual en el presente. Cada persona puede interpretar las cartas de acuerdo con su propia intuición y experiencia. Al utilizar el Oráculo Osho Zen, es recomendable hacerlo con respeto, discernimiento y una actitud abierta hacia la exploración y el despertar de la conciencia.